Hoy, llegué a una gasolinera y resulta que la estaban inaugurando. Allí estaba el conocido payaso de la tele Vitauva. Gran personaje conocido por varias generaciones de laguneros. Conversé con él, hombre añorante de sus gloriosos programas, pero aún vigente entre su público.
Ser payaso no es fácil. Conocí en la ciudad de Monclova Coahuila a uno que había concursado en la olimpiada del payaso Nacional y ganado. Hasta hay escuelas para ello y su ambiente es pesado cuando de bromas se trata, entre ellos.
Algunos payasos tiene un concepto de la vida muy distinto al de nosotros. Me he topado con algunos que hasta son críticos de política, y uno que piensa que nada más se la viven payaseando.
Hay que reconocer la gran trayectoria del señor Vitauva.
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